Un poco de mi

Siempre radiante pero vacía por dentro
su envoltorio asegura el éxito del encuentro
y sí, es cierto, que tras varias ocasiones,
en aquel envontorio hueco, acabarás por oir tu eco.


Dicen que nada es para siempre,
que tarde o temprano uno recoge lo que siembra,
pero cuando la única semilla de la que dispones
proviene del seno impuesto desde el momento en el que naces
es más dificil variar la cosecha y a la vez cambiar tu vida.

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